Llega el verano y con ello la manicura cobra protagonismo en nuestro outfits, ya que es la época del año dónde más se lucen pies y manos en playas y piscinas. La nueva y healthy tendencia en uñas es la nueva manicura semipermanente o dipping.
Gracias al dipping conseguirás olvidarte de las uñas durante dos semanas y lo mejor de todo, sin estropear tus uñas.
¿En que consiste el dipping?
Tras realizar una manicura completa, se aplica un primer para desengrasar la uña. Después se extiende una base para proteger la uña y un gel adhesivo que funciona tipo pegamento y que permite que el esmalte se adhiera a la uña y no a la piel. Lo siguiente es introducir los dedos en un tarrito de polvos acrílicos llamado power Polish dip del color elegido (este sería el tradicional esmalte de uñas). Luego se aplica un gel activador para endurecer, fijar y uniformar el polvo en la uña, que seguidamente se liman dándoles la forma deseada. Y por último se aplica un top coat de brillo.
Principales beneficios de esta manicura semi permanente
Gracias al dipping o manicura permanente puedes conseguir unas uñas perfectas durante unos 14 días, por lo que es ideal para el verano. Y lo mejor de todo es que la uña no se daña tanto como con otros tipos de manicuras, ya que la uña sigue siendo natural, puesto que el polvo no se pega a la misma, si no al gel adhesivo previamente aplicado. El resultado es bastante parecido al de las uñas acrílicas, pero nada dañino para las uñas